Arvit: 19:15
Shajarit: 9:00
Minja: 18:15
Comunicación Kehilá
Con motivo de Tisha BeAv, se organizó una visita al CEM, con motivo de recordar un momento muy doloroso de nuestra historia en esta fecha que también marcó otro momento determinante en el destino del pueblo judío.
En la oportunidad de conocer este innovador espacio, que a diferencia de los museos convencionales, logra una experiencia en la que todos los sentidos se ponen en juego, para conocer las circunstancias históricas de lo que las comunidades judías de Europa vivieron como víctimas del nazismo.
El Centro logra una participación interactiva basada en la metodología del programa Facing History and Ourselves, el cual busca bajo un sustento académico, la generación de procesos de reflexión y compromiso por parte de los participantes, a partir de eventos históricos emblemáticos como lo fue el Holocausto.
Durante el recorrido guiado por las diferentes instalaciones y escenografías, se relata el desafortunado hecho desde cuando las familias judías en muchos países de Europa, gozaban de los mismos derechos que todos los ciudadanos, hasta la llegada de la Noche de los Cristales Rotos el 9 de noviembre de 1938, fecha que marca el inicio de la persecución y la desintegración de la vida de cada familia, cada individuo, que sucumbió en los Guetos, en los campos de concentración, en las cámaras de gas, en los hornos crematorios. Esta secuencia se percibe a través del relato de un niño, con efectos de luz, la ambientación e incluso, hasta la temperatura y la sensación de hacinamiento, los hechos desafortunados que llevaron a la muerte a seis millones de judíos.
La concientización de esta pérdida, no solo en cuanto a cantidad numérica sino a la desintegración de valores, el respeto, el derecho, la tolerancia, cada vida que ya no existe, el dolor y el sufrimiento que desgarra toda la dignidad humana.
Esta experiencia sensorial bien lograda con el tema del Holocausto y de los diferentes genocidios en diferentes países y lugares del mundo, nos llevan a la reflexión y la concientización de lo que cada uno debe hacer hoy en día para rescatar, cuidar y vigilar el respeto al ‘otro’.
La descripción a través del recorrido, logra el ejercicio de profundizar sobre el tema de la intolerancia a quienes por algún motivo nunca han tenido acceso a esta información y a retomarla a quienes conocen la Shoá, quizás en la experiencia familiar porque nuestros abuelos fueron sobrevivientes o porque sus padres y hermanos murieron siendo víctimas.
El CEM ha recibido las visitas de colegios tanto judíos como no judíos, así como de diferentes personalidades y a diferentes sobrevivientes de la Shoá, quienes han dejado testimonios y su opinión sobre este Centro.
El trayecto finaliza con un área dedicada a los Justos entre las Naciones, porque es precisamente el objetivo de este proyecto, trascender en la capacidad de que cada uno de nosotros se comprometa a cambiar el mundo, y nunca permanecer en silencio ante cualquier acto que atente contra el respeto y la vida de todo ser humano.
