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La extrema derecha está por delante tras la primera vuelta de las elecciones legislativas francesas, según los sondeos, lo que aumenta la posibilidad de que un partido con raíces antisemitas obtenga la mayoría en el Parlamento.
Las proyecciones de la votación del domingo mostraron que Agrupación Nacional, liderada por Marine Le Pen, obtuvo alrededor del 34% de los votos, seguida por una coalición de partidos de izquierda, que obtuvo el 29%. El partido centrista del presidente Emmanuel Macron, Renacimiento, quedó en tercer lugar con el 22%. Aún no se ha publicado un recuento final de los votos.
La Agrupación Nacional fue fundada hace más de 50 años por el padre de Le Pen, Jean Marie Le Pen, quien ha sido condenado repetidamente por discurso de odio antisemita y ha hecho declaraciones minimizando el Holocausto. Marine Le Pen ha tratado de distanciarse a sí misma y al partido de su padre, expulsándolo de sus filas y cambiando el nombre del partido.
El partido ahora enfatiza la oposición a la inmigración, así como el escepticismo sobre la Unión Europea. El partido de centroderecha de Francia abrazó Agrupación Nacional antes de la votación del domingo. Pero muchos judíos franceses todavía desconfían del partido. Muchos judíos también miran con recelo a la ultraizquierdista Francia Insumisa, que ha enfrentado sus propias acusaciones de antisemitismo y fue parte del bloque de izquierda que quedó en segundo lugar el domingo.
La semana pasada, antes de la votación, el grupo paraguas judío francés CRIF publicó en X: "¡Ni RN, ni LFI!", los acrónimos de los partidos de extrema derecha y extrema izquierda. "El peligro de los extremos nunca ha sido mayor. Juntos, movilicémonos contra aquellos que representan un peligro para la República y que están tratando desesperadamente de engañar a los franceses".
Los resultados son un revés para Macron, quien convocó elecciones anticipadas hace menos de tres semanas tras el fuerte resultado de Agrupación Nacional en las elecciones para el Parlamento Europeo, en las que los partidos de extrema derecha obtuvieron ganancias en todo el continente. Macron esperaba obstaculizar el ascenso de la extrema derecha.
Hasta la llegada de Marine Le Pen a la cúspide del partido en 2011, el Frente Nacional se había asociado de forma indisoluble a la figura de su padre: un veterano de las últimas guerras coloniales francesas, proclive a la provocación y condenado en varias ocasiones por sus comentarios antisemitas.
"No digo que las cámaras de gas no existieran. Yo no las vi. No he estudiado especialmente la cuestión. Pero creo que es un detalle en la historia de la II Guerra Mundial", dijo en una entrevista en 1987.
Desde entonces, Jean Marie volvió a mencionar "el detalle" de las cámaras de gas en repetidas ocasiones.
Hasta que en 2015 le costó la expulsión del partido y el distanciamiento de su hija, que desde entonces no ha compartido imagen pública con él.
Las acusaciones de antisemitismo habían sido una de las principales armas arrojadizas de sus rivales políticos. Un punto débil frente al que la defensa era difícil.
Se dice que Marine Le Pen intentó enérgicamente alejarse del legado de su padre. Se esmera en proyectar una nueva imagen inclusiva, niega todo tipo de ánimo antisemita o racista y hace constantes acercamientos a la comunidad judía francesa y a las nuevas generaciones de ascendencia norteafricana.
La Agrupación Nacional puede encaminarse a la mayor victoria de su historia. La segunda ronda de votación del 7 de julio, en la que los dos candidatos más votados de cada circunscripción se enfrentarán en una segunda vuelta, determinará la composición de la Asamblea Nacional de Francia, la cámara baja del parlamento. Pero los resultados del domingo sugieren que Agrupación Nacional podría obtener una mayoría absoluta en el cuerpo, lo que le permitiría elegir al primer ministro del país.
El candidato a primer ministro de Agrupación Nacional es Jordan Bardella, de 28 años. Si es elegido, reemplazará a Gabriel Attal, quien asumió el cargo en enero y tiene ascendencia judía.
La Agrupación Nacional nunca ha tenido el poder en Francia. Pero sus candidatos han avanzado en el pasado a la ronda final de votación en las elecciones presidenciales francesas, incluidas las dos elecciones más recientes, cuando Macron derrotó a Le Pen. Las próximas elecciones presidenciales francesas serán en 2027.