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Presidente Herzog el pasado miércoles 2 de abril, comentó sobre el Informe y Resolución del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas: “La mayor forma de culpabilización de las víctimas y la menor claridad moral”.
"El informe y la resolución del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas de hoy representan la mayor forma de culpabilización de las víctimas y la menor claridad moral. En las desgarradoras palabras de Amit Soussana, una rehén liberada que sufrió abusos sexuales a manos de los bárbaros terroristas de Hamás, y que esta misma semana fue honrada y condecorada por el gobierno estadounidense por su valentía: “En cautiverio, no tenía control sobre mi cuerpo ni sobre mi vida. Resistí lo mejor que pude”.
Mientras que las investigaciones de instituciones prominentes como el Parlamento del Reino Unido, e incluso la propia ONU, demuestran inequívocamente la naturaleza sistemática y premeditada de la violencia sexual y los crímenes cometidos por Hamás, el llamado Consejo de Derechos Humanos de la ONU pretende acusar a Israel de ataques por motivos de género. En lugar de condenar el terrorismo brutal, vilipendia a quienes defienden vidas inocentes.
El CDHNU ha abandonado hace tiempo la integridad moral, pero incluso para sus estándares, esto es un nuevo mínimo: encubrir las atrocidades de Hamás mientras se ignora el dolor y la agonía israelíes no es "justicia", es un insulto a la verdad y la decencia. Es un insulto a la humanidad.
