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Shirel Golan, una sobreviviente de la masacre de Hamas en el festival de música Nova , fue encontrada muerta en su apartamento el día de su 22º cumpleaños.
Según su familia, Shirel sufría un trastorno de estrés postraumático debido a los horribles acontecimientos que vivió en el festival el 7 de octubre , cuando Hamás invadió Israel, masacrando a unas 1.200 personas, incluso en la zona del Festival de Música Nova, y secuestrando a otras 250.
El hermano de Shirel, Eyal, contó que el 7 de octubre él y sus hermanos montaron un centro de operaciones familiar para ayudar a Golan a escapar de la zona. Afortunadamente, después de dejar el coche de sus amigos, fue rescatada por un agente de policía que la llevó a Kfar Maimon. El primer vehículo acabó convirtiéndose en un "coche de la muerte", en el que fueron asesinadas 11 personas.
Ella presentaba síntomas de trastorno de estrés postraumático (TEPT) , entre ellos aislamiento y retraimiento social. A pesar de los esfuerzos de la familia por alentarla a buscar tratamiento, el hermano informó que no recibió la asistencia adecuada de las autoridades estatales. Fue hospitalizada dos veces en el Hospital Lev Hasharon en Pardesiya, pero la familia subrayó que nunca fue realmente atendida como una víctima de TEPT de la masacre de Nova.
Apoyo a sobrevivientes de traumas
Eyal agregó: “Si el Estado no despierta, habrá más casos como éste”. Hizo un llamado a las autoridades para que aumenten la concienciación y mejoren el tratamiento de los sobrevivientes del trauma para prevenir tragedias similares en el futuro.
Shirel Golan era la menor de cinco hermanos y le sobreviven sus padres y cuatro hermanos.
Los participantes se enteraron de la muerte de Golan a través de las noticias que se escucharon mientras asistían a un gran evento de baile Zumba que se celebró el domingo por la noche justamente para recaudar fondos para el apoyo psicológico de los supervivientes del festival. El evento tuvo lugar simultáneamente en Tel Aviv y Londres, fue organizado por la organización filantrópica JNF-UK y dirigido en Tel Aviv por Eylon Levy, ex portavoz inglés del gobierno durante la guerra entre Israel y Hamás y bailarín de Zumba.
Levy comentó: “Lamentablemente, hoy recibimos noticias trágicas sobre Golan, de bendita memoria, que ponen de relieve la urgente necesidad de que las organizaciones civiles apoyen a los sobrevivientes de la masacre. Es nuestro deber moral”.
En Israel los trastornos por estrés postraumático se presentan en un alto índice de la población debido a vivir en estado de guerra, independientemente de los trágicos sucesos que han dejado a personas y familias enteras en procesos muy dolorosos.
El suicidio puede ser una consecuencia trágica derivada del TEPT, al haber experimentado o presenciado eventos extremadamente traumáticos. La sensación de que el trauma no termina es lo que lleva a sentimientos de impotencia y desesperación, sumada al agotamiento emocional de revivirlo repetidamente.
No sólo a nivel individual sino también de manera colectiva, esa impotencia aprendida se refiere a que sin importar lo que se haga, la situación no puede cambiar. Es importante trabajar el aislamiento emocional y tratarse adecuadamente con redes de apoyo sólidas con el fin de recuperar el control de sus vidas y reducir el riesgo de tragedias futuras tanto en Israel como también en comunidades judías de diferentes países ante el incremento de situaciones antisemitas que reviven eventos traumáticos personales o heredados de familiares sobrevivientes.