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Israel acoge con satisfacción la decisión de muchos países de suspender su financiamiento a la UNRWA y llama a realizar una investigación profunda, independiente y transparente sobre la conducta de la agencia en Gaza, tanto en lo que respecta a la participación de empleados de la UNRWA en la masacre del 7 de octubre como en el empleo de agentes de Hamas y la participación de elementos terroristas en sus actividades.
Tras el anuncio de la UNRWA del despido de 12 empleados que participaron en la brutal masacre en Israel el 7
de octubre, y tras el anuncio de muchos países que dejarán de transferir fondos de apoyo a la organización, la
Embajada de Israel recuerda que la UNRWA ha sido acusada durante años por dejar de ser una organización
de ayuda a los refugiados y pasar a formar parte de la maquinaria del terrorismo de Hamas.
La UNRWA, órgano de la ONU responsable de atender a los refugiados palestinos, se hizo de la vista gorda ante
una gran cantidad de empleados que participaron en actividades terroristas antes del ataque del 7 de octubre,
en la propia masacre e incluso después. Según un informe del "Wall Street Journal", alrededor del 10% de los
aproximadamente 12,000 empleados de la UNRWA en Gaza tienen vínculos con organizaciones terroristas. Además, desde el comienzo de la guerra se han encontrado armas en el interior de las escuelas financiadas por la UNRWA. En una de ellas, en Shaja'ya, los terroristas se escondieron e incluso lucharon desde el interior del edificio. En casas particulares se halló una gran cantidad de cohetes y armas, cuyas municiones estaban guardadas en cajas de la UNRWA.
Israel acoge con satisfacción la decisión de muchos países de suspender su financiamiento a la UNRWA y llama
a realizar una investigación profunda, independiente y transparente sobre la conducta de la agencia en la
Franja de Gaza, tanto en lo que respecta a la participación de los empleados de la UNRWA en la masacre del 7
de octubre como en el empleo de agentes de Hamas y la participación de elementos terroristas en sus
actividades.
La UNRWA juega un papel clave en la persistencia y la ampliación del problema de los refugiados y en la
educación a una narrativa que promueve el odio y el terrorismo e impide el logro de la paz. La UNRWA es una
parte esencial del problema y no puede ser parte de la solución. Otras entidades deben reemplazarla cuando
termine la guerra.
Esta desvelación de la participación de empleados de la UNRWA en el terrorismo se suma al fracaso
generalizado de las Naciones Unidas – y por su Secretario General - de responder correctamente a los
acontecimientos del 7 de octubre y la guerra que estalló a raíz de ellos.
