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Hoy amanecimos con la noticia que se ha producido un gran incendio en una sinagoga de Melbourne y la policía australiana ha abierto una investigación sobre un incendio "sospechoso".
Al lugar acudieron unos 60 bomberos y 17 camiones.
A las 04:10 horas de la madrugada, el cuerpo de bomberos local recibió un llamado por un incendio en la sinagoga Adass Israel, en el bario de Ripponlea, al sureste de la capital. En su interior se encontraban unos pocos fieles que estaban sentados orando y lograron salir a tiempo, por lo que no se registraron víctimas fatales; únicamente, un hombre resultó herido en una mano mientras huía del fuego.
Se trató de un “incendio generalizado” que dejó “el interior completamente destruido”, con “daños significativos” a la estructura, el mobiliario y los libros sagrados.
El Presidente Isaac Herzog habló con el Primer Ministro australiano Anthony Albanese, dijo en un comunicado: “He hablado ahora con el Primer Ministro de Australia, Anthony Albanese @AlboMP, y he expresado mi firme condena del horrible ataque incendiario a la sinagoga Adass Israel en Australia.
Tras las atrocidades llevadas a cabo por Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023 y desde entonces, se ha producido una ola intolerable de ataques a las comunidades judías en Australia y en todo el mundo. Le señalé al Primer Ministro que este aumento y los ataques antisemitas cada vez más graves contra la comunidad judía exigían una acción firme y contundente, y que este era un mensaje que debía escucharse claramente de los dirigentes de Australia. Le agradecí sus continuos esfuerzos para combatir el antisemitismo y expresé mi confianza en que las fuerzas del orden locales harían todo lo posible para llevar a los perpetradores ante la justicia".
El Primer Ministro Benjamin Netanyahu, en igual forma ofreció un mensaje:
"La quema de la sinagoga Adass Israel en Melbourne es un acto abominable de antisemitismo. Espero que las autoridades estatales utilicen todo su peso para evitar este tipo de actos antisemitas en el futuro. Lamentablemente, es imposible separar este acto reprensible de la posición antiisraelí extrema del gobierno laborista en Australia, incluida la escandalosa decisión de apoyar la resolución de la ONU que
pide a Israel "poner fin a su presencia ilegal en el territorio palestino ocupado, lo más rápidamente posible", e impedir la entrada al país de un ex ministro israelí.
El sentimiento antiisraelí es antisemitismo".
El primer ministro, Anthony Albanese, condenó lo ocurrido y calificó el incidente de ultraje.
“Esta violencia, intimidación y destrucción en un lugar de culto es un ultraje. Este ataque deliberado e ilegal va en contra de todo lo que somos como australianos, todo lo que tanto nos ha costado construir como nación y ha puesto vidas en peligro... está claramente dirigido a crear miedo en la comunidad”, repudió en un comunicado, en el que aseguró que habrá “tolerancia cero” con el antisemitismo.
“No tiene absolutamente ningún lugar en Australia”, dijo.
