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De Australia a Europa: Al descubierto el alto funcionario iraní que promovió ataques terroristas en todo el mundo y la ola de arrestos de las células terroristas que operaban bajo su mando.
Terror sin la huella iraní: Alto reclutamiento de extranjeros, uso de delincuentes y comunicaciones secretas: Una mirada entre bastidores a los mecanismos terroristas iraníes y el alto precio que Irán paga en el ámbito internacional por sus fracasos.
En medio de los persistentes intentos del régimen iraní por promover el terrorismo contra objetivos israelíes y judíos en todo el mundo, el Mossad revela por primera vez nuevos detalles sobre los responsables de importantes atentados frustrados en Australia, Grecia y Alemania entre 2024 y 2025.
Desde los sucesos del 7 de octubre, Irán ha intensificado sus esfuerzos para atacar intereses israelíes y judíos en todo el mundo. Gracias a las intensas operaciones del Mossad, junto con agencias de inteligencia y seguridad de Israel y de todo el mundo, se han desarticulado decenas de canales de ataque promovidos por Irán. Estas operaciones antiterroristas han salvado numerosas vidas y han permitido emprender acciones legales e investigativas contra los implicados en el terrorismo.
Las exhaustivas investigaciones han llevado a la identificación de instigadores clave del terrorismo dentro del régimen iraní, quienes dirigen mecanismos terroristas, así como a la revelación de los métodos que estos mecanismos emplean para promover ataques y dañar a personas inocentes, lo que ha tenido un alto coste diplomático para Irán.
Uno de los mecanismos más importantes que se revelan ahora por primera vez es el de Sardar Amar, alto comandante de la Guardia Revolucionaria, quien dirige el Cuerpo 11.000 bajo el mando de Ismail Qa'ani, comandante de la Fuerza Quds. Bajo el mando de Amar, se estableció un importante mecanismo para promover ataques contra objetivos israelíes y judíos tanto en Israel como en el extranjero. Este mecanismo es directamente responsable de los atentados desacreditados en Grecia, Australia y Alemania solo el año pasado, y sus numerosos fracasos condujeron a la ola de arrestos y a su exposición.
Recientemente se informó que, tras el aumento de la actividad terrorista iraní y el desmantelamiento de la infraestructura del mecanismo de Sardar Amar en su territorio, las autoridades policiales de Australia y Alemania han tomado severas medidas diplomáticas contra altos funcionarios iraníes. Entre las acciones emprendidas contra los implicados se encuentran la expulsión del embajador iraní en Australia y su declaración como persona non grata, así como la citación del embajador iraní en Alemania para una reprimenda. Estas medidas sin precedentes pretenden enviar un claro mensaje de tolerancia cero ante la actividad terrorista en su territorio.
Durante años, el régimen iraní ha considerado el terrorismo como una herramienta para cobrar un precio a Israel, perjudicando a personas inocentes en todo el mundo, sin asumir costos militares, diplomáticos ni económicos. Bajo esta lógica, los grupos terroristas operan manteniendo una negación plausible y una separación entre la actividad violenta e Irán.
La revelación, por primera vez, de que el mecanismo de ataque de Sardar Amar estuvo detrás de los atentados en Grecia, Alemania y Australia demuestra la ineficacia de su gestión y socava los intentos iraníes de operar clandestinamente.
La actual campaña internacional contra el terrorismo iraní le niega a Irán la posibilidad de negar su participación, elimina su inmunidad y le impone un alto costo en el ámbito político internacional.
El Mossad, junto con sus socios en Israel y en todo el mundo, actuará con firmeza para frustrar las amenazas terroristas de Irán y sus aliados, y para proteger a los ciudadanos de Israel y a las comunidades judías de todo el mundo.
Se adjuntan (sin atribución; cortesía) imágenes del jefe del mecanismo de ataque iraní, Sardar Amar, y de los comandantes más destacados de la Fuerza Quds.
