Jag Kasher VeSameaj, desde Monterrey

Este Pesaj, igual que el primer Seder celebrado hace miles de años, nos recuerda la travesía hacia la libertad que comenzó en Egipto. Nuestros antepasados, guiados por la fe y la esperanza, cruzaron el mar Rojo, dejando atrás siglos de esclavitud para caminar hacia la redención.

Hoy, aquí en Monterrey, en nuestro querido club y en nuestras instalaciones, nos reuniremos como comunidad para recordar esa historia, no solo como un hecho lejano, sino como un viaje que seguimos viviendo cada año.

Este Seder tiene un significado especial: celebramos un siglo de presencia judía en esta tierra, cien años de historia, luchas y sueños compartidos. Cien años en los que hemos construido comunidad, fortalecidos por la memoria de nuestros abuelos, quienes nos enseñaron que la libertad no es solo un regalo, sino una responsabilidad que debemos defender y transmitir.

Al alzar la copa de vino, evocamos a aquellos que nos precedieron y renovamos nuestro compromiso con la esperanza de un futuro mejor, para nuestra comunidad, para Eretz Israel y para todo Am Israel. Que la luz de esta festividad nos inspire a seguir construyendo, con fe y amor, un mundo de paz.

Jag Kasher VeSameaj, desde Monterrey, con el corazón lleno de gratitud y esperanza renovada.